En muchas ocasiones, el coste de aceptar una herencia, en términos de impuestos, tasas y comisiones, puede ser bastante elevado y hacer que renunciar a ella sea la única opción viable. Sin embargo, si no quieres renunciar a la herencia, existe una alternativa: financiarla a través de un préstamo hipotecario. En este artículo te explicaremos cómo funciona este tipo de préstamo y los pasos que debes seguir para solicitarlo.
Aceptar una herencia es una decisión completamente voluntaria y depende de cada persona. En algunos casos, los herederos pueden decidir renunciar a la herencia por diferentes motivos, como por ejemplo, si la propiedad está gravada con deudas o impuestos pendientes, o si los costes de mantenimiento de la propiedad son demasiado elevados. También puede haber otros motivos personales, como no tener interés en mantener la propiedad o no querer asumir la responsabilidad que conlleva la herencia.
Recibir una herencia no tiene un coste específico en sí mismo. Es decir, no hay un precio establecido para recibir una herencia en términos monetarios. Sin embargo, sí existen costes asociados a la gestión y trámites de una herencia, como impuestos, gastos de notaría, honorarios de abogados, entre otros. Estos costes varían según la comunidad autónoma en que se encuentre la propiedad heredada y las leyes aplicables en cada caso.
Si decides aceptar la herencia, tendrás que hacer frente a una serie de gastos. Estos gastos son:
El plazo suele oscilar entre los tres y los seis meses a partir del fallecimiento del causante.
Es importante tener en cuenta que algunos de estos gastos, como el impuesto de sucesiones y la plusvalía municipal, pueden tener plazos específicos para su pago y, en algunos casos, se pueden solicitar prórrogas.
Por ejemplo, los honorarios, tasas y comisiones se pagan al emitirse la factura.
Un préstamo de aceptación de herencia es un tipo de préstamo hipotecario que permite financiar los gastos asociados a la gestión de una herencia, incluyendo los costos notariales, el impuesto de sucesiones, la plusvalía municipal, los honorarios de abogado y registrador, entre otros.
Este préstamo se puede solicitar por parte de los herederos que necesiten financiar los gastos de la herencia, y suele estar respaldado por la propiedad heredada, lo que significa que se utiliza como garantía el valor de la propiedad para obtener el préstamo.
La finalidad de este tipo de préstamo es facilitar la gestión de la herencia y evitar que los herederos tengan que hacer frente a los gastos de la misma con sus propios recursos, lo que puede resultar especialmente difícil en aquellos casos en los que los costos asociados a la herencia son elevados.
Sí, se puede solicitar un préstamo hipotecario para aceptación de herencia. De hecho, es una de las opciones de financiamiento más comunes para los herederos que necesitan financiar los gastos asociados a la gestión de una herencia.
En este caso, la entidad financiera que concede el préstamo hipotecario se asegura la devolución del préstamo con la garantía de la propiedad heredada, lo que permite a los herederos obtener un préstamo con mejores condiciones que las que ofrecen otros tipos de préstamos personales o de consumo.
El funcionamiento del préstamo hipotecario para una herencia es similar al de cualquier otro préstamo hipotecario. Sin embargo, en este caso, la finalidad del préstamo es financiar los gastos asociados a la gestión de la herencia, y se utiliza como garantía la propiedad heredada.
En términos generales, el proceso de solicitud de un préstamo hipotecario para una herencia incluye los siguientes pasos:
Existen dos tipos de préstamos hipotecarios que se pueden utilizar para financiar los gastos de una herencia. Estos son:
El primer tipo son los créditos al consumo, los cuales pueden ser utilizados para cualquier fin, incluyendo el pago de los gastos de la herencia. Estos préstamos tienen una garantía personal, lo que significa que no se necesita hipotecar ninguna propiedad ni presentar avales de terceros. El interés medio de estos préstamos es de aproximadamente el 7%.
El segundo tipo de préstamos hipotecarios son los préstamos con garantía hipotecaria. Estos préstamos son los más comunes para financiar la aceptación de una herencia, aunque también se pueden utilizar para otros fines. Para obtener este préstamo, se debe hipotecar una propiedad que puede ser la vivienda heredada o cualquier otro inmueble que esté libre de cargas. El interés medio de estos préstamos es de alrededor del 10%.
Una vez conoces cómo financiar la herencia de una propiedad con un préstamo hipotecario, puedes acudir a un asesor hipotecario, para que podamos ayudarte con el proceso de solicitud del préstamo y aclarar todas las dudas que tengas. En Gohipoteca te acompañamos de principio a fin durante todo el proceso. ¡Pregúntanos!